Hoy en día son muchos los conductores que reciben sanciones por “incumplimiento de la obligación de identificar al conductor“ sin saber siquiera los motivos por los que se les ha impuesto, y las consecuencias que pueden llegar a tener.
Muchos son los vehículos que a diario transportan mercancías o viajeros, pero ¿Sabemos realmente qué restricciones tienen que seguir? Y en caso de incumplir alguna de ellas, ¿La multa es para la empresa o para el conductor? Vamos a distinguir los casos más comunes y sus correspondientes multas.
Las multas de tráfico de los coches de empresa pueden suponer a la larga un problema para las compañías, no solo por el coste de lo que se tenga que pagar, si no por quién tiene que responsabilizarse del pago. Esta cuestión suscita muchas dudas, por ello la identificación del conductor en las multas de tráfico, resulta esencial.
Las nuevas disposiciones normativas, y en particular la nueva Ley de Procedimiento Administrativo, ha provocado que las nuevas tecnologías tengan cada vez más impacto en las relaciones de las empresas con las Administraciones Públicas, obligándolas a relacionarse electrónicamente con las mismas, y a las Administraciones de dotarse con los medios y sistemas necesarios para cumplir con la ley.
La novedad sobre la DEV, Dirección Electrónica Vial, es que no hay novedades.
La Dirección Electrónica Vial (DEV) se trata de un domicilio electrónico llevado a cabo para sustituir la dirección postal por una dirección de correo electrónico en la que actualmente se encuentra la Dirección General de Tráfico y algunos Ayuntamientos con competencias sancionadoras en materia de tráfico.
