Como bien sabemos, todos las personas jurídicas están obligadas a disponer de Dirección Electrónica Vial (DEV) tanto si los vehículos son propios, como si son en alquiler. La gestión de la DEV para los trámites de multas, se convierte en muchos casos para las empresas en una pesadilla, puesto que no disponen de los medios humanos y materiales, además del conocimiento necesario, para llevar a cabo una gestión adecuada, es en ese momento cuando debemos de plantearnos externalizar el servicio a través de una empresa especializada en la gestión de multas.
Hoy en día son muchos los conductores que reciben sanciones por “incumplimiento de la obligación de identificar al conductor“ sin saber siquiera los motivos por los que se les ha impuesto, y las consecuencias que pueden llegar a tener.
Aunque en este momento se hayan restringido los desplazamientos por la declaración del estado de alarma, sigue habiendo denuncias por infracciones de circulación. Un exceso de velocidad detectado por un radar de pórtico, saltarse un semáforo en fase roja controlado por un fotorojo o estacionar en un espacio reservado pueden ser algunos de los motivos por los que nos pueden denunciar.
La Dirección Electrónica Vial (DEV) es un buzón electrónico de la Dirección General de Tráfico en el que nos podemos dar de alta para recibir las comunicaciones y notificaciones que nos hagan desde la DGT, comunicaciones que tienen los mismos efectos jurídicos que la notificación en papel.
Las multas de tráfico de los coches de empresa pueden suponer a la larga un problema para las compañías, no solo por el coste de lo que se tenga que pagar, si no por quién tiene que responsabilizarse del pago. Esta cuestión suscita muchas dudas, por ello la identificación del conductor en las multas de tráfico, resulta esencial.